Connect with us

Hi, what are you looking for?

Política

“Mi destitución es una primera instancia, después viene Perotti y sin duda Edery y Schiappa Pietra están en la mira”

“Hay que cuidar a los fiscales Edery y Schiappa Pietra” y “ahora van por Perotti”. Esas fueron las advertencias que Marcelo Sain lanzó horas antes de ser destituido e inhabilitado por diez años por la Legislatura provincial para ocupar cargos en el Ministerio Público de la Acusación.

El ex ministro está convencido de que la “entente” política que, según él, es transversal a todos los partidos políticos y viene gobernando la provincia, va a querer destituir al actual gobernador provincial. “Ahora van por Perotti”, asegura. Y prevé que el primer paso es el juicio político que están preparando contra el ministro de Desarrollo Social de su gabinete, Danilo Capitani.

En una entrevista al programa “La misma piedra” que conduce la periodista María Herminia Grande por Televisión Regional, Sain se despachó a su gusto durante casi media hora sobre los entretelones de su llegada a la provincia durante el gobierno socialista y explica por qué su presencia fue motivo de tanta polémica.

Asegura que “no hay carpetas” en contra de nadie, pero anticipa que se van a sorprender con lo que den a conocer algunas investigaciones judiciales que están en marcha y que tienen a actores de la política en la mira.

A quienes dedica especiales consideraciones son el ministro de la Corte Rafael Gutiérrez, el fiscal general Jorge Baclini, el ex ministro y actual diputado provincial Maximiliano Pullaro y los senadores Armando Traferri y Lisandro Enrico.

Estas fueron las principales definiciones de Sain, muchas de las cuales ya había pronunciado en otras ocasiones:

—“Es el fin de de la saga Sain en la provincia”.

—“El dictamen de la Justicia no es vinculante con el proceso legislativo. En todo caso después la Provincia tendrá que hacerse cargo económicamente de los daños que esta irresponsabilidad política genera”.

—“Voy a hacerle juicio a la Provincia. Para mí hubo violación de compromisos  internacionales que la Argentina ha asumido, en Naciones Unidas, la Organización  de Estados Americanos, por eso hicimos reserva de litigar contra la Provincia y llevar esto a la instancia superior de nuestra provincia que es la Corte Suprema”.

—“La Corte Suprema de Justicia de Santa Fe en su mayoría está precintada, porque uno de sus miembros más conspicuos, Rafael Gutiérrez, forma parte del concordato que armó la estrategia en mi contra. Gutiérrez hizo la ley anti-Sain, que es claramente inconstitucional, sobre la base de la cual se produce todo este proceso”.

—“Le creo más al ex fiscal Ponce Asahad (detenido y que cerró un proceso abreviado) que a Gutiérrez, que es el que le dio el proyecto a Traferri”.

—“El trasfondo de todo esto es que tocamos intereses que eran intocables. En la provincia existe un bloque que atraviesa el sistema político santafesino y que integran el Frente Progresista, el radicalismo y los sectores conservadores peronistas”.

—“Si se investiga el crimen organizado, se llega a las estructuras de poder. Es casi el ABC de esto. Acá el crimen organizado estaba en las villas y en los barrios populares; en el mundo narco más ostensible. Cuando salimos de los barrios populares y nos fuimos a las financieras, cuando nos fuimos a las estructuras policiales, judiciales y políticas, empezaron los problemas”.

—“Mi destitución es una primera instancia, pero después viene Perotti. La semana que viene van a ir contra un ministro del gobernador, el de Desarrollo Social, Danilo Capitani. Ya están preparando el proceso de juicio político”.

—“Me voy a la Nación. El lunes voy a presentar la reincorporación a la Universidad Nacional de Quilmes como profesor investigador full time. Ya hablé con las autoridades, me voy a hacer cargo de una materia, Ciencia Política, que la he dado históricamente. Eso es de lo único que tengo certidumbre. El resto, soy una persona de consulta del ministro de Seguridad Aníbal Fernández, pero estoy muy cansado”.

—“Tengo un estilo político que siempre me granjeó prestigio y bonanza en la provincia de Buenos Aires, donde las cosas siempre se dicen de frente. En Santa Fe tuve modales inadecuados porque acá se esconde mucho bajo de la alfombra. Es una sociedad menos heterogénea, donde las infracciones van debajo de la alfombra y no se ventilan, el que las ventila es una persona incómoda para todo el mundo”.

—“Fui un ministro muy ortodoxo del gobernador, no me corrí ni un milímetro de los lineamientos de Perotti. Y estoy completamente convencido que la estrategia del gobernador ha sido la adecuada. Él nunca manipuló ninguna Justicia pero sí brindó el contexto político necesario para que los fiscales estuvieran tranquilos y no vayan por ellos”.

—“Los fiscales Schiappa Pietra y Edery están en la mira, sin lugar a dudas. Sepamos que hay una situación complicada desde el punto de vista institucional”.

—“Tuvimos un ministro de Seguridad con lazos clarísimos con narcopolicías: Maximiliano Pullaro. Tuvimos un juicio contra el comisario Alejandro Druetta en el que se comprobó, se escuchó en audios durante las audiencias públicas el vínculo del senador Lisandro Enrico y Pullaro con un narcopolicía. Era el hombre de ellos en la provincia del sur”.

—“(Leonardo) Peiti se valía de la relación con el MPA, con el jefe de los fiscales rosarinos y con un conjunto de funcionarios de más alto rango de la Fiscalía Regional de Rosario. Está claramente comprobada la participación de Traferri en una de las asociaciones ilícitas más grandes de la provincia. Porque si no Traferri iría a la audiencia imputativa”. 

—“Hubo dos personas muy comprometidas con esto: el gobernador Perotti y el senador Roberto Mirabella. Después no vi a nadie más comprometido con esto, ni siquiera en nuestro propio gobierno. La soledad de ellos es importante”.

—“También algunos legisladores que ni siquiera son del sector político de Perotti, muchos de los cuales estuvieron en el ala opuesta en la interna como el diputado Leandro Busatto, o Matilde Bruera, que no pertenece al perottismo, han jugado un rol institucional muy importante”.

—“Las distintas denuncias que me fueron haciendo funcionarios del organismo fueron incentivadas por Baclini. Fijate la maniobra de denuncia que hacen una serie de funcionarios del Organismo de Investigaciones, todos militantes radicales, los sacan del Organismo cuando yo vuelvo al Organismo, hacen una denuncia de que me pasaban información, que no pudieron comprobar nunca, y esas personas están en el MPA protegidas por Baclini”.

—“Esta saga no termina acá. El problema no es Marcelo Sain, sino la institucionalidad política de Santa Fe”.

—“Obvio que no hay carpetas. Acá lo que hay son investigaciones judiciales, con el debido control de garantías por un juez distinto del Ministerio Público de la Acusación. Lo que duelen son las investigaciones que están judicializadas, no información o comentarios que pueden estar rodando por ahí”.

—“Miguel Lifschitz fue quien me ofreció venir a Santa Fe a ordenar el Organismo de Investigaciones porque él mismo observaba que lo que estaban haciendo sus propios séquitos del Frente Progresista y funcionarios del Ministerio Público de la Acusación, era un organismo judicial sin relevancia. Entonces él me ofrece que vea, que sugiera cómo corregir eso. Después de una larga reunión que tuve con todos ellos, me ofrecen venir acá y yo digo por concurso y vine. Eso fue en marzo de 2018. Y me llamó Baclini, diciendo: te queremos acá”.

—“En esa época era el peronista bueno, bonaerense, progresista, de izquierda, el que había creado la Policía de Seguridad Aeroportuaria. Cuando me convertí en el ministro de Perotti pasé a ser el hijo de puta más grande de la provincia porque el gorilaje de estos tipos es tremendo”.

—“Con el socialismo se empezó a enfriar la relación cuando intervenimos desde el organismo en la primera gran investigación, la de Alvarado. Porque después del primer tramo, que fue por el homicidio de Lucio Maldonado, empezamos con los fiscales Edery y Schiappa Pietra a construir la acusación de asociación ilícita. Y ahí vino la protección policial. Detuvimos un staff de policías de alta jerarquía que eran los mandamases de la PDI de Rosario”.

—“Si hacías allanamientos y metías presos a negros de la periferia, no había ningún problema. Delincuentes rústicos, los narcos, los de siempre, los que habitan Piñero y otras cárceles federales. Cuando entraste adentro de los bulevares, ahí empezaron los problemas”.

—“La política pactó con el mundo policial muchas cosas. Y pactó también ordenar la calle, pero la Policía de Santa Fe es de muy mala calidad. Es una Policía que perdió el control de la calle hace más de una década. El control legal e ilegal de lo que pasa. Si hubiera una policía santafesina con un férreo control de la calle, ciertas violencias no se producirían. Hay una Policía que ni siquiera controla el nivel de la violencia, porque hasta la Policía trucha, la Policía ilegal, te controla la violencia, porque la violencia visibiliza el negocio criminal”.

—“En el conurbano bonaerense la Policía controla el territorio. Para bien o para mal, legal o ilegalmente. Cuando se rompe el equilibrio, hay violencia narco, enseguida se restituye el orden poniendo presos, matando criminales y regulando el escenario. Ese es un instrumento de gobernabilidad que acá no hay”.

—“Acá hay un nivel de fragmentación del mundo criminal. En uno de los mercados más importantes, San Martín, en la zona norte del Gran Buenos Aires, no hay una disputa criminal como acá. Acá se disputa búnker por búnker, delivery por delivery, sindicato por sindicato”.

—“A Perotti lo van a querer destituir bajo cualquier concepto, juicio político por ejemplo. Se lo están por hacer a Capitani, que dicen que entregó subsidios para sectores políticos del peronismo. Lo que hicieron conmigo: un tuit. A mí me están despidiendo por un tuit donde yo digo que los militantes que denunciaron aquella maniobra eran todos radicales. Ese es el motivo por el cual a mí me despiden. Ese es el proselitismo que hice. Pueden decir cualquier cosa”.

—“Pueden hacerle juicio político si tienen los votos, y el apoyo de algunos sectores de la Corte Suprema, del establishment, de sectores mediáticos que militan en contra del gobernador Perotti. Lean bien los medios en Rosario y van a ver un foco de resistencia a Perotti enorme, con pautas, sin pautas”.

—“Tengo una estima fenomenal por Omar Perotti. Para mí es una persona honesta y de bien, tengo un cariño enorme, me siento orgulloso de haber sido su ministro. A mí en mi vida política e institucional me importa un bledo este trance. Si estuviéramos en agosto de 2019 y Omar Perotti, sabiendo lo que va a pasar, me ofreciera nuevamente el Ministerio de Seguridad, volvería a aceptarlo”. 


Nota relacionada


Tarjeta roja para Sain: la Legislatura expulsó al acusado de espiar a todos y de romper la convivencia política en Santa Fe

Facebook comentarios

Autor

Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

También te puede interesar