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Política

Entre suspensiones y despidos, se derrumbó la actividad económica y sigue cayendo el empleo en la región

El secretario de Trabajo de Santa Fe Julio Genesini aseguró esta semana que en la provincia existen casi once mil trabajadores afectados por suspensiones, la mayoría en empresas e industrias del sector metalúrgico, aunque también hay casos en la construcción, la gastronomía e incluso la vigilancia privada. Además, el gobierno provincial lleva contabilizados unos cinco mil despidos, según lo tramitado a través del Ministerio de Trabajo santafesino. La tendencia, aseguró el funcionario, es a la pérdida del empleo formal. Las suspensiones y despidos se dan en un escenario de recesión económica profunda y rápida donde la actividad en la industria provincial cayó prácticamente por completo: según el último informe de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe), el 89 % de las ramas manufactureras presentó una caída de su nivel de actividad respecto al mismo mes del año anterior. Los números son semejantes a los del período de aislamiento por la pandemia (marzo-mayo 2020).

El último informe ejecutivo de Fisfe indicó que la actividad fabril en la provincia enfrentó en marzo de 2024 un retroceso inédito de 18,8 % interanual. Sólo en el primer trimestre del año se acumuló una contracción del 14,6 % con relación al mismo período de 2023. Las expectativas industriales, dice el informe, muestran resultados negativos. La mitad de las industrias relevadas considera que la demanda interna y la capacidad instalada disminuirá durante el segundo trimestre del año. La proporción de industrias que espera una baja de su dotación de personal (22,2 %) y de las horas trabajadas por el personal afectado al proceso productivo (29,8 %) quintuplica y sextuplica al grupo con expectativas positivas. 

Los números de la Municipalidad de Rosario van en la misma línea. Los datos en base a facturación que elabora el Centro de Información Económica (CIE) para marzo de este año revelaron, en comparación con el mismo mes de 2023, una caída generalizada en todos los sectores: la industria manufacturera del 33,9 %, la construcción 38,9 %, los servicios privados 7,8 % y el comercio 21,3%.


Suspensiones


En el escenario de incertidumbre y caída económica que se abre mes a mes, la provincia, las empresas y los sindicatos buscan maniobras para que no caiga el empleo santafesino. Así, unas 60 empresas aplicaron mecanismos de suspensión de trabajadores en la provincia, alcanzando a un total de 10.800 personas. La mayoría de los casos se dieron en el sur de la provincia, con Acindar a la cabeza –  la planta siderúrgica suspenderá a mediados de junio su producción y con ella a toda su planta por unos 15 días -. 

Según detalló el titular de la cartera laboral provincial, unas 30 empresas venían con suspensiones desde noviembre. Este año se incorporaron nuevas firmas y, aseguró Genesini, hay otras tantas acercándose al ministerio para recurrir a alguna medida de este tipo. “Este escenario se da en función de la retracción de la actividad económica, que si bien ya venía bastante complicada, durante este año se intensificó la caída de la actividad. La recesión se ha dado en profundidad y en pocos meses, y eso está complicando a varios sectores”.

Las suspensiones son acuerdos de los que forman parte el Ministerio de Trabajo, los sindicatos y los empleadores, y surgieron como un instrumento para transitar la recesión manteniendo los puestos de trabajo. De esta forma, los trabajadores suspendidos cobran mensualmente una suma no remunerativa que sustituye al salario y puede significar entre el 75 y 100 por ciento del sueldo. La empresa, sin embargo, no abona las contribuciones patronales, sólo sostiene la cuota sindical y la obra social. Los acuerdos de suspensión que llevó adelante la provincia incluyen dos condiciones: que mientras dure el convenio no puede haber despidos y que no se involucren en el pago de salario no remunerativo a los trabajadores que le faltan diez o menos años para jubilarse, para que no se vea afectado su haber jubilatorio. 

“Son empresas que están pasando un momento crítico, por algo tienen que suspender. La evolución de la economía y el tiempo que tarde en reactivarse va a ir determinando si se suman más o menos empresas. Se aspira a mantener los planteles de trabajadores, de modo tal que sigan contando con mano de obra capacitada. La clave está en ver cuánto tiempo puede prolongarse la caída de la actividad”, explicó el secretario. 


Despidos


Al panorama de incertidumbre que se abre con las miles de suspensiones, se le suman los despidos. El último informe de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe) indica que el trabajo registrado en el sector privado de la provincia —541 mil empleados— sufrió en enero y febrero de 2024 bajas de 0,1 % y 0,2 % interanual respectivamente. En la medición mensual, hubo una caída del empleo formal en los primeros tres meses de gobierno de Javier Milei, que dejó 11.600 trabajadores registrados menos. En lo particular, el empleo industrial de esos primeros tres meses registró una baja de 1.300 asalariados. Fue la primera caída interanual desde septiembre de 2020. El informe señala otra tendencia: la porción de actividades fabriles con menor nivel de empleo crece sensiblemente con el paso de los meses. El Ministerio de Trabajo de Santa Fe, por su parte, lleva tramitados unas cinco mil desvinculaciones en los primeros cinco meses del año. “Es un volumen que demuestra que hay una tendencia a la pérdida del trabajo registrado”, advirtió Genesini. 


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