Audacia, propuestas y asumir riesgos. Esas parecen ser algunas de las características que Ciudad Futura le imprimió a su construcción política. Ahora redobla la apuesta: impulsa la conformación de una nueva plataforma electoral en la que aspira a participar junto al peronismo, a sectores del progresismo y la centroizquierda, a organizaciones de base y gremiales, para elegir en las Paso al candidato a intendente de Rosario. Caren Tepp, concejala y referente de Ciudad Futura, denomina a esa plataforma Movimiento de Movimientos, en contraposición al Frente de Frentes de centroderecha que aspira a unir a la oposición en Santa Fe.
Tepp sostiene que en 2023 se reconfigurará el escenario político de la provincia y que la disolución del Frente Progresista y el corrimiento del socialismo hacia Juntos por el Cambio dejará sin representación a un amplio sector del electorado rosarino. “Tenemos claro que no van a ir a votar al PS en el marco de un acuerdo con el PRO. Es un escenario de oportunidades para ganar Rosario”, dice la edila.
También asegura que la posibilidad de confluir en las elecciones no implica que Ciudad Futura se sumará al frente de Todos ni al PJ sino que se trata de un acuerdo estratégico y que el candidato a intendente de la agrupación es Juan Monteverde. “Vamos a ir a la interna para ganarla”, sostiene. No obstante, cree que la “crisis en la que está sumergida la ciudad, tanto por los niveles de violencia como de desigualdad” hace que las elecciones del año que viene “no sean solo una discusión de nombres sino de proyectos”.
Este es el diálogo telefónico que mantuvo con Suma Política.
—¿Ciudad Futura va a participar en las Paso del Frente de Todos?
—No en el Frente de Todos. Lo que estamos hablando con distintos sectores del PJ y otros partidos provenientes del progresismo, que no quieren sumarse al Frente de Frentes con el PRO, es construir una nueva plataforma política que nos permita llegar con un candidato fuerte a las elecciones para intendente de Rosario.
—¿Por qué no en el Frente de Todos?
—Para nosotros esto tiene que tener una nueva identidad política. Por eso lo de Ciudad Futura no se va a dar en términos de incorporación sino que se trata de un acuerdo para la configuración de un nuevo espacio en Rosario.
—¿Que se concrete el acuerdo que plantea Ciudad Futura depende de la conformación del Frente de Frentes con toda la oposición santafesina adentro?
—Por supuesto que en parte depende de eso. Pero también de la vocación de los distintos espacios con los que estamos dialogando para confluir en esta plataforma. Hay mucho por hablar porque nosotros no hacemos política en el vacío.
—¿En qué estado se encuentran las conversaciones?
—Como Ciudad Futura nos estamos dando dos trabajos; por un lado hablar con los sectores y las organizaciones más cercanas, no solamente fuerzas políticas sino también territoriales, sociales y gremiales, para avanzar juntos en la construcción de la candidatura de Juan Monteverde a intendente como referente de todo este espacio; y por otro lado lo hacemos con sectores del PJ para poder configurar el marco de una interna en el caso de que se concrete el Frente de Frentes.
—¿Por qué es tan determinante para este acuerdo la conformación del Frente de Frentes?
—Porque no estamos dispuestos a subestimar lo que significaría un frente electoral con JxC, la UCR y el PS. Si bien es cierto que con el PS podemos tener ciertas coincidencias en algunos temas, en ese frente van a estar participando expresiones mucho más alineadas con discursos no solamente de derecha sino también de odio, o propuestas a los problemas que tenemos como las de Gabriel Chumpitaz expresando las políticas de Bullrich.
—Si van a una interna con el PJ, ¿por qué los votantes de Ciudad Futura, que en muchos casos los apoyaron por ser una opción por fuera de los partidos tradicionales, los acompañarían?
—Se va a reconfigurar todo el escenario político en Santa Fe. En las últimas elecciones se venía hablando de cuatro fuerzas en Rosario, de hecho el año pasado para el Concejo hubo siete puntos entre el primero y el último candidato, con lo cual hay una dispersión y heterogeneidad en el electorado. La posibilidad que viene trabajando el Frente Progresista de alinearse a la centroderecha de manera estructural para las próximas elecciones tiene incidencia en el escenario local. Incluso la decisión del gobierno de Santa Fe de posponer las elecciones para septiembre también contribuye a nacionalizar el escenario provincial.
—Además de la elección a intendente, el año que viene Ciudad Futura pone en juego tres de las cinco bancas que tiene hoy en el Concejo. ¿Este acuerdo que proponen es una jugada de alto riesgo?
—El 2023 es un escenario de oportunidad y por eso vamos a priorizar algunas estrategias con mayor grado de pragmatismo. Y por otra parte, no es la primera vez que lo proponemos. En 2019 entendíamos que era necesaria una construcción similar usando el mecanismo de las Paso, que nos permitiese darles a los rosarinos y rosarinas una opción distinta. Y si se quiere, en ese momento la ciudad votó una renovación aunque haya sido dentro del propio espacio del Frente Progresista.
—¿Por qué cree que 2023 es un escenario de oportunidad?
—Muchos electores ya no van a tener la posibilidad del Frente Progresista, porque no va a existir. Y también porque se va a reflejar el corrimiento del PS hacia Cambiemos en Santa Fe. No nos sorprende, pero sí es cierto que para un electorado rosarino muy grande que se autodefine como progresista y de centroizquierda, se abre la posibilidad de buscar otras expresiones políticas. Quizás nos viene acompañando a nosotros en el ámbito legislativo local pero ahora también puede ser parte de la construcción de un nuevo electorado para ganar la ciudad. Tenemos claro que no van a ir a votar a los referentes del PS a los que votaban hace algunos años en el marco de una configuración que incluya a Cambiemos y al PRO.
—Cómo definiría al votante de Ciudad Futura?
—Somos conscientes de que nuestros votos provienen en muchos casos de sectores que están incluso orgánicamente identificados con el kirchnerismo a nivel nacional, pero también desde sectores que históricamente habían votado al PS en el Frente Progresista y que en los últimos años no se ven representados con los acuerdos de los gobiernos socialistas con el PRO en Rosario. Tenemos identificado, incluso en las últimas elecciones ejecutivas, cómo la composición de nuestro voto en Rosario tuvo expresiones tanto del PJ como del FP a nivel provincial. Después tenemos una particularidad: es un voto que aspira a una nueva forma de construcción política. Y Ciudad Futura seguirá garantizando eso porque no ingresa al Frente de Todos ni al PJ. Lo que estamos analizando es la construcción de un escenario en el que tácticamente pueda armar la mejor estrategia para la concreción del modelo de ciudad que venimos impulsando. Mantendremos nuestra identidad, que además se va a ver garantizada con candidaturas propias para las bancas del Concejo por fuera de la interna.
—¿Con qué sectores del PJ están hablando?
—Con el Movimiento Evita tenemos los mayores grados de coincidencias en términos de diagnóstico; tenemos una agenda en común en los barrios populares, hay vocación de trabajar y confluir en acuerdos políticos para 2023. También hablamos con La Corriente de la Militancia para ver cuáles son sus expectativas. Pero además lo estamos haciendo con organizaciones de base, territoriales, gremios, y los queremos hacer parte de la posibilidad de ganar Rosario el año próximo.
—¿Se van a sumar partidos de centroizquierda?
—Tenemos vocación de convocarlos a ser parte de la candidatura de Juan Monteverde. En el caso del diputado Carlos del Frade ya ha dicho que está dispuesto a darle su apoyo. Más allá de esos espacios y de su militancia, tenemos vocación de diálogo para que podamos construir en común un gobierno distinto para Rosario. No sólo para que apoyen una candidatura sino para que se sientan parte de ese proyecto.
—¿Qué chances tiene Ciudad Futura en una interna donde compitan los candidatos del PJ?
—Vamos a la interna para ganarla.
—En las últimas horas se conoció la designación de Diego Giuliano como ministro de Transporte de la Nación. ¿Se suma otro postulante para la Intendencia?
—Sí, podría decirse que se agrega a la grilla. Pero no sé cuáles serán sus planes electorales. Cuanto más expresiones se puedan manifestar en la interna mejor va a ser, que el electorado tenga la posibilidad de elegir el mejor candidato. Es probable que haya más de dos candidatos dentro de lo que llamamos Movimiento de Movimientos. Más allá de los nombres y eventuales candidaturas, entendemos que lo que hay que construir en las próximas elecciones es un proyecto de ciudad para los próximos 10-15 años; la crisis en la que está sumergida Rosario, tanto por los niveles de violencia como de desigualdad, hace que no solamente sea una discusión de nombres propios sino de proyectos y para eso se necesita construir equipos, tener políticas claras y vocación de transformación de la cultura política, incluso del propio Estado, para dar respuestas a los temas estructurales. Tenemos que tener en claro qué es lo que vamos a hacer el 11 de diciembre de 2023 cuando entremos al Palacio municipal.
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Periodista. Cofundador y editor de Suma Política. Ex secretario de Redacción del diario La Capital. En Twitter: @rpetunchi
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