“Uy, cómo llueve”, exclama con el teléfono en el oído la seis veces campeona mundial de boxeo Alejandra Oliveras, mientras mira el agua caer profusamente contra el parabrisas de su auto. La “Locomotora”, como es conocida mediáticamente, recorre desde que comenzó la campaña para convencional constituyente toda la provincia, haciendo campamento en la santafesina ciudad de Santo Tomé, el espacio que le dio lugar para crecer como deportista, activista por el desarrollo deportivo, filántropa y, desde 2021, como política.
La boxeadora dialogó con Suma Política y afirmó que la campaña para ser parte de la convención que modificará la constitución provincial tras 62 años “viene maravillosamente”. Su historia de vida y el deporte que eligió para desempeñarse profesionalmente le enseñaron a ser optimista y a ir siempre para adelante, y observa positivamente el recibimiento de los santafesinos cuando se acerca a hablar con ellos: “Me dicen que hay mucha gente que no sabe de qué se trata lo que vamos a votar el domingo. Hay que estar más con los vecinos”, apuntó.
Alejandra Oliveras compara la Carta Magna de Santa Fe con una casa: “La Constitución está viejísima. Si una casa en 63 años no la arreglás se te rompen los caños, se te cae la pared, lo mismo pasa con la Constitución. El mundo cambió, no solamente Santa Fe. Nuestro pensamiento, nuestras formas de vivir, el clima”.
En su discurso, la “Locomotora” no habla de reformar la Constitución sino de actualizarla. Ella advierte que “la gente se asusta cuando le hablás de reformas. Yo les digo que se queden tranquilos, que no vamos a cambiar todo, sino que vamos a tocar algunos puntos que hoy no van más”.
Es la segunda vez que busca desembarcar en la política institucional. La primera fue en las elecciones legislativas de 2021 cuando intentó conseguir una banca a diputada por el sello Unite Santa Fe, propiedad del polifacético empresario José Bonacci, padre de la legisladora libertaria Rocío.
En esta campaña, con Unite volcado a favor de los libertarios, fue el Frente por la Esperanza la alianza que convocó a Oliveras para pelear por un lugar en la Convención desde la boleta por distrito único (es decir, que todos los santafesinos podrán optar por la boxeadora). Como hacen todas las locomotoras, ella es la que abre el tren de candidatos que disputarán un lugar para reescribir la Carta Magna.

“El mundo cambió”
Al ser consultada sobre los motivos que la llevan a postularse nuevamente, la deportista señala justamente a eso: el deporte.
Nacida en Jujuy y criada en Córdoba, en un hogar signado por la carencia, Alejandra terminó la primaria en el colegio Misioneros Salesianos, del pueblo rural de Alejandro Roca, con todas las credenciales para ser abanderada, pero no la dejaron porque iba a la escuela con ropa de segunda mano y las autoridades del colegio no la dejaron ser otra cosa que primera escolta de la celeste y blanca. Después de eso continuó la secundaria con muy buenas notas, hasta que dejó los estudios con tan solo 15 años tras quedar embarazada de su primer hijo.
Víctima de violencia de género y abusos físicos, empezó a entrenar hasta que un día el instinto le ganó al miedo y de un cross a la mandíbula logró detener a su pareja cuando éste quería violentarla. Acto seguido agarró sus cosas, cargó a su hijo de meses y se fue de su hogar para nunca volver. Según sus relatos, el deporte la sacó de su lugar de sumisión. De víctima.
“Mi intención es sacar a los chicos de la calle con el deporte. La Ley del Deporte significa que los chicos puedan ser apoyados por el Estado para ir a competir. Hay referentes nacionales que no tienen plata para viajar, las vecinales están vacías, los clubes no tienen fondos. ¿Cómo pretenden sacar a los chicos de la calle y alejarlos de los narcos si estos espacios se caen a pedazos?”, reflexionó.
La multicampeona devenida en postulante a constituyente busca ponderar en la Constitución el derecho de los santafesinos al acceso a los espacios deportivos “para que los vecinos salgan de la calle. Los chicos tienen ganas de vivir, de tener y cumplir sueños”.
Pero no es el único punto que la Locomotora lleva como propuesta de campaña.
“Queremos sacar los fueros de los políticos. ¿Cómo puede ser que entrás en un cargo político y no te pueden investigar? Es un privilegio que sólo lo tiene Dios. Laburan de mayo a noviembre, eso no puede ser. Tienen que laburar para la gente. Los legisladores tienen que trabajar de febrero a enero como hacemos todos”, exclamó, a la vez que apuntó contra las reelecciones indefinidas: “Tenemos que quitar la reelección indefinida. Los funcionarios tienen que tener una sola reelección y que se vayan a su casa”, sumó a sus promesas en caso de llegar a la constituyente.
Oliveras expone su punto frecuentemente con la metáfora del agua podrida: “El agua que no se mueve se pudre. Y eso es lo que está pasando, que no se mueve la gente, son siempre los mismos nombres. Que llegue gente fresca, joven, con ganas. Si estás treinta años en un mismo lugar, es mentira que conocés los problemas de la gente o de que sos parte de la solución. Dejale el lugar a otro”.
Por otro lado, la educación también toma un lugar preponderante para la boxeadora: “En 1962 no existía la computadora, los teléfonos eran a manija y rosca y ahora los chicos tienen problemas cognitivos, tienen ludopatía, falta de concientización sobre cómo se utiliza y se transita en internet. Lo que tenemos que hacer es concientizar a los chicos en las escuelas sobre lo que es el mundo virtual”, explicó Oliveras y añadió que es necesario “capacitarlos para que sepan defenderse del daño que pueden llegar a recibir en las redes, en los teléfonos”.
Al abrir el abanico de temas que la candidata del Frente por la Esperanza busca abordar si ocupa una banca en la convención, presenta a su equipo como una lista multidisciplinaria de candidatos con diferentes orígenes partidarios y ocupaciones.
En el segundo lugar de la lista aparece Ariel Sclafani, director de partidos de la Liga Profesional de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), y lo sigue la nutricionista especializada en terapia ortomolecular Caren Danisa Fruh, de origen radical. “En el equipo tenemos abogados, antropólogos, trabajadores. Lo que queremos es el bien de la gente. Todo lo que vamos a poner en la nueva Constitución es para el bien de la gente, para eso es la política”, aseguró Oliveras.
Cuando le preguntan su postura sobre el movimiento feminista y el rol de las disidencias sexuales ella responde que “en el año que se sancionó la actual Constitución, el colectivo LGBT no tenía visibilización. Lo que queremos es que tengan los mismos derechos que deben tener todas las personas”, e hizo alusión al acceso al trabajo y a la vivienda.
“Defiendo a muerte a todas las mujeres del mundo. Pero no soy de ese feminismo que se saca la remera en la calle, se queda en tetas y dice muerte al macho. Todos esos machos son nuestros maridos, nuestros hermanos”, dijo la candidata a este medio y siguió: “El amor es personal y al igual que el sexo. Estoy de acuerdo con la búsqueda de la igualdad de derechos pero siempre sumando entre ambos géneros. Tenemos que estar unidos, no echarlos”.
De Santa Fe al mundo
“Hay mucho por cambiar, mucho por hacer. Pero yo quiero salvar vidas. Yo vengo del dolor, sé lo que es sufrir, lo que es que te discriminen por ser chica y ser pobre y que no te quieran dar oportunidades. Yo quiero cambiar eso en Santa Fe”, sostuvo la seis veces campeona del mundo en boxeo.
Con 47 años, la jujeña cuenta que se mudó a Córdoba con apenas un año y meses escapando del hambre. El boxeo no llegaría sino hasta mucho después, con un niño a cuestas y un segundo varón más a los 18 años. Su segundo hijo la encontraría en un camino ya iniciado en el ring.
No obstante, no fue hasta mayo del 2006 que con una inolvidable pelea le arrebató el título mundial a la mexicana Jackie Nava en Tijuana, la favorita para ganar el título mundial supergallo del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Esa primera enorme victoria la llevó a conocer a Amílcar Brusa, entrenador de Carlos Monzón, de cuya mano se vendría a radicar a La Invencible Santa Fe para nunca más irse.
“Hace 15 años que estoy viviendo en la provincia. Amilcar me sacó campeona mundial y me llevó a Santa Fe capital. Entrené mucho en Rosario, en Colón y entrenando en Santa Fe gané cinco títulos del mundo. Desde 2010 estuve en Santa Fe y en 2018 puse mi gimnasio en Santo Tomé”, contó a este medio.
Desde que se retiró del boxeo profesional da clases en su propio gimnasio y recorre el país brindando charlas motivacionales para empresas privadas. En 2024, Patricia Bullrich le ofreció un contrato para trabajar en el Ministerio de Seguridad de la Nación como directora de seguridad de eventos deportivos, pero Oliveras declinó la oferta debido a “sus compromisos ya asumidos”, que también la llevaban a Buenos Aires. Pero con otros objetivos.
Durante el año pasado, Oliveras debutó como actriz participando en la última temporada de la aclamada serie “El Marginal”, que se estrenará en Netflix en el mes de junio. Para entonces, “Locomotora” ya tendrá los resultados puestos de las elecciones a constituyentes: “Me tocó un papel durísimo de una mujer que asesina a su marido, trabajo mucho en Buenos Aires. Las anteriores temporadas son un poroto al lado de lo que hicimos ahora”, confesó a Suma Política.

