El electo gobernador Maximiliano Pullaro ya confirmó que va a modificar el actual elenco de 12 ministerios que tiene ahora el gobierno provincial. Quedarían nueve o diez y se fusionarán varias áreas.
Hay dos carteras que quedarían absorbidas en el nuevo esquema y por lo tanto dejarían de ser ministerios: el de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat, y el de Ambiente y Cambio Climático.
También sería modificado el actual Ministerio de Igualdad, Género y Diversidad, creado por la actual gestión de Omar Perotti, y que ahora podría seguir pero como secretaría.
El de Infraestructura, del que actualmente dependen Obras Públicas, Aguas Santafesinas y la Empresa Provincial de la Energía, tendría un perfil diferente, ya que el nuevo gobernador lo piensa al servicio de otra área, por lo que seguiría con menor rango dentro del Ministerio de la Producción y Desarrollo. Lo mismo ocurriría con el de Ambiente, que también sería absorbido por el de Producción.
Se volvería a crear el Ministerio de Obras Públicas, que además de su ocupación específica sumaría a ASSA y la EPE, en un esquema similar al que funcionó durante la gestión de Miguel Lifschitz.
El gran ministerio político del nuevo gabinete será el de Gobierno, con lo que podría desaparecer o refuncionalizarse la cartera que hoy se llama de Gestión Pública. Lo que cambiará es la actual secretaría de Justicia, que mantendrá su jerarquía pero se mudará del Ministerio de Gobierno del que depende ahora y pasará al de Seguridad.
Está confirmado además que no habrá modificaciones con los actuales ministerios de Educación, Salud, Cultura, Trabajo, Economía y Desarrollo Social.
Un criterio que definió es que quien esté al frente de cada ministerio tendrá la facultad de decidir sus estructuras, a diferencia de lo que suele pasar cuando una coalición llega al gobierno, donde hay funcionarios al frente que pertenecen a un partido y las segundas líneas son de otro espacio interno. “Algo parcelado siento que no va a funcionar”, dijo Pullaro en sus primeras conferencias de prensa.
Entre las pistas que dio después de ganar las elecciones, el flamante gobernador electo mencionó que para designar a los futuros ministros, algunos deberán renunciar a los cargos legislativos para los que fueron designados en las pasadas elecciones, como le ocurrió a él mismo cuando Miguel Lifschitz lo convocó para el ministerio de Seguridad y había sido reelecto como diputado provincial.
Son varios los nombres que se mencionan como posibles funcionarios de la próxima gestión, aunque ninguno de ellos fue hecho público por el gobernador electo. Entre ellos hay dos que se mencionan en todos los borradores: los senadores reelectos Lisandro Enrico y Felipe Michlig. El primero integra una terna de nombres para el Ministerio de Seguridad, y el segundo podría ser el nuevo ministro de Gobierno. En el mismo equipo de cercanía hay que anotar al diputado provincial y candidato a legislador nacional Juan Cruz Cándido y al diputado nacional Gabriel Chumpitaz.
Para Seguridad también se mencionan al ex secretario del Servicio Penitenciario Pablo Cococcioni y al ex secretario de Seguridad Pública, el ex gendarme Omar Pereira, que ya estuvieron en el equipo de Pullaro cuando fue ministro.
En Economía es casi número puesto el principal referente de Pullaro en esa área, Pablo Olivares, y en Educación aparecen los nombres del ex decano de la facultad de Humanidades de la UNR José Goity, la santafesina Carolina Piedrabuena, además de dos ex rectores, Albor Cantard (de la UNL, también ex diputado nacional) y Darío Maiorana (de la UNR).
En Salud la persona de confianza del electo gobernador es Silvia Ciancio, pero por razones personales no sería designada en el cargo de ministra.