Connect with us

Hi, what are you looking for?

Política

Más temprano que tarde: la reforma constitucional tiene consenso, falta definir cuándo es el momento

El recurrente tema de la reforma de la Constitución de Santa Fe vuelve a meterse en la agenda política de la provincia. Ningún dirigente de Unidos cree que este sea el momento para avanzar y, a la vez, la gran mayoría acepta que la reforma es necesaria más temprano que tarde.

El tema tabú siempre ha sido la reelección del gobernador y la oportunidad de instrumentarla. Hoy, el mandato de cuatro años es en realidad de tres años y poco más; el último se escurre entre las convocatorias a elecciones y la pérdida de poder si el gobierno solo tiene boleto de salida.

Por el momento se descartó que el gobernador Maximiliano Pullaro hable sobre eso en su discurso de apertura de las sesiones legislativas del próximo miércoles 1° de mayo, aunque hubiera sido pertinente porque esa fecha es de por sí una muestra del atraso de la Carta Magna más antigua del país. A contramano de la mayoría de las otras provincias y del Congreso nacional, formalmente la Legislatura santafesina comienza sus sesiones ordinarias el quinto mes del año. Una reforma constitucional seguro incluiría la ampliación de esas fechas.

En este 2024 eso parece un detalle sin relevancia, ya que si hay algo que tuvo hiperactividad desde que asumió el gobierno del frente Unidos fueron las cámaras de Diputados y Senadores, que aprobaron casi siempre por unanimidad o por amplia mayoría unos treinta proyectos propuestos por el Poder Ejecutivo.

Con el inicio de la actividad legislativa regular, arranca la temporada de proyectos de reforma de la Constitución. En las dos gestiones anteriores hubo acumulación de pedidos (llegaron a presentarse una decena) y hasta se creó una comisión para unificar los diferentes proyectos. Las diferencias -menores- se impusieron por sobre las coincidencias y no se pudo avanzar.

Ahora el oficialismo en el gobierno tiene una mayoría inédita en las dos cámaras, que daría más posibilidades para concretar una reforma. Dos  legisladores de partidos que integran la coalición de gobierno ya reingresaron sus iniciativas, y se presume que puede haber más. Lo fundamentan no en un interés del gobierno sino en la necesidad de que los proyectos sigan vigentes.

El 1° de febrero el diputado Joaquín Blanco presentó el proyecto del socialismo, que proclama la necesidad de la reforma. Blanco preside el bloque del PS, que integran 14 legisladores y este sábado asumió como titular del partido en la provincia de Santa Fe. 

El diputado Walter Ghione, del partido UNO, presentó este viernes otra vez su proyecto ingresado en 2022. Su cercanía con el gobernador podría hacer pensar que tuvo un guiño para hacerlo, aunque asegura que es iniciativa propia y el objetivo fue reingresarlo para que no pierda estado parlamentario.

Desde el gobierno por ahora aseguran que la agenda no da tregua y al paquete de medidas legislativas del inicio de gestión le siguieron las decisiones para combatir la inseguridad, después las discusiones en el marco de la paritaria estatal, luego la polémica por el presentismo docente, y atravesando todo eso la madre de todas las batallas, la defensa a nivel nacional de algunos puntos de la ley Bases para defender la producción santafesina y recuperar obras financiadas por la Nación. Ahora enfrenta el debate por la posible reforma al sistema previsional santafesino y el 25 el Pacto de Mayo. Ya adelantó también que quiere hacer cambios en la integración de la Corte Suprema, un asunto todavía pendiente pero no olvidado.

Unificar la duración de los mandatos de intendentes y presidentes de comuna en cuatro años, consagrar las autonomías municipales, permitir el voto desde los 16 años, establecer límites para las reelecciones legislativas y ejecutivas en la provincia y hasta habilitar la posibilidad de un segundo mandato del gobernador son los puntos en los que previamente se piensa armar una suerte de consenso básico. Un núcleo de coincidencias que evite demoras y debates estériles y favorezca un acuerdo. 

También dependerá de cómo evolucione el ambiente político y la gestión del gobierno en los próximos meses. Si hay algo que este gobierno no puede arriesgar es no tener asegurado ganar una elección de constituyentes, que deberían elegirse en 2025 junto con el resto de los comicios de medio término.

Si la idea avanza en algún momento, el radicalismo gobernante no se olvida del Pacto de Olivos y rescata algunos puntos que podrían ser aplicados. El más importante: un Núcleo de Coincidencias Básicas. Es decir, que antes de llamar a elecciones constituyentes, los partidos políticos construyan un gran acuerdo sobre lo que se debe reformar y (casi tan importante) qué no. 

El 14 de noviembre de 1993, el por entonces presidente Carlos Menem y el expresidente Raúl Alfonsín firmaron el Pacto de Olivos, que fijó un Núcleo de Coincidencias Básicas que fue el eje de la reforma constitucional aprobada en 1994. Ese acuerdo fijó, entre otras cosas, la reducción del mandato presidencial de seis a cuatro años, la reelección y la elección de tres senadores por distrito (dos por la mayoría y uno por la minoría). 

En Santa Fe hay un camino allanado: el PJ viene de impulsar la reforma en la gestión Perotti. Legisladores peronistas presentaron proyectos y el por entonces ministro de Gobierno, Roberto Sukerman, fue el encargado de impulsar un debate en torno al tema. El radicalismo y el socialismo siempre fueron reformistas. En la discusión que se dio en 2022 en la provincia, el PRO también se pronunció a favor.  

Además de los proyectos en Diputados, los principales referentes de Unidos en el Senado también creen que en algún momento deberán trabajar en la reforma constitucional. Sostienen, por ejemplo, que “es un problema” que haya elecciones en las comunas cada dos años. “Es un tema a resolver. Los mandatos de los jefes comunales deben ser de cuatro años y todas las elecciones deben estar unificadas en el mismo año”, le dijo uno de ellos a Suma Política. 

En la Casa Gris paran la pelota. “No es momento para perder un minuto en pensar en modificar la Constitución”, responden oficialmente, sin descartar que más adelante ese sea un tema que se presente al debate o que se imponga desde la propia Legislatura (lo más probable). “La gente tiene que saber que estamos abocados a resolver los problemas”, le dijo a este medio un funcionario clave. 

Por eso ahora la energía del Gobierno está concentrada en la gestión. En su discurso del miércoles próximo, Pullaro hará un exhaustivo relato de cómo encontró el gobierno, de la herencia recibida, de las medidas que tomó desde su asunción, rescatará el acompañamiento de la Justicia y de las cámaras legislativas que mantuvieron reuniones inéditas para el inicio del año, y trazará los ejes del futuro inmediato.


Facebook comentarios

Autor

Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

También te puede interesar