Un diputado provincial del bloque Vida y Familia reclamó que no lo dejaron entrar al recinto en la reanudación de las sesiones presenciales de la Legislatura santafesina porque no está vacunado, y pidió que se respete su libertad de elegir no aplicarse ninguna dosis contra el Covid 19.
Este martes elevará una nota planteando esa situación que ya hizo pública por los medios. Pero el presidente de la Cámara de Diputados, Pablo Farías, no dejó lugar a una negociación posible sobre el tema. “Si el legislador tiene una posición personal sobre esta cuestión debiera respetar al resto que no quiere exponerse”, le dijo a Suma Política este fin de semana.
Juan Domingo Argañaraz es el único legislador provincial que decidió no aplicarse ninguna vacuna contra el Covid porque considera que se trata de ensayos que están aún en tiempos de experimentación. “Van por la tercera etapa y son cinco”, dijo para justificar su espera.
También reveló que su madre de 76 años le pidió no vacunarse. No obstante aclaró que no es un “antivacuna”, ya que se colocó por ejemplo todas las vacunas contra la gripe en los últimos años.
El último jueves, la Cámara de Diputados de la provincia reanudó después de 17 meses las sesiones presenciales de todos sus miembros (son 50 legisladores). Antes se permitía sólo la presencia de los presidentes de bloque, y el resto sesionaba de modo virtual.
A raíz de las flexibilizaciones que se permitieron por la baja de contagios, la semana pasada cambió ese escenario y los 50 diputados santafesinos pudieron volver a las bancas, pero hubo cuatro que no lograron hacerlo. El de Argañaraz es el único caso que no parece tener solución en lo que queda del año.
Los otros tres no tienen el mismo problema, aunque dos están referidos a las vacunas. Incluso uno de los que estuvo virtual fue el presidente del bloque al que pertenece el legislador oriundo de Rafaela: se trata del abogado rosarino Nicolás Mayoraz, que se vinculó de modo virtual a la última sesión porque adujo problemas personales, pero tiene colocadas las dos dosis de una vacuna contra el Covid y va a poder estar en las sesiones que vienen.
Los otros dos casos que estuvieron con conexión virtual el pasado jueves fueron dos legisladoras que todavía tienen una sola dosis: María Laura Corgniali (del PS) y Georgina Orciani (de la UCR). En la sesión del reencuentro presencial tampoco estuvieron, de ninguna de las dos maneras, otros dos diputados, pero porque pidieron estar ausentes por motivos ajenos a este tema: Leandro Busatto y Paola Bravo, ambos del PJ.
“Fue una decisión por consenso de todos los bloques”
Consultado por Suma Política sobre el tema del legislador que decidió no vacunarse, Farías aclaró en principio que la exigencia de que los legisladores tuvieran dos dosis de alguna vacuna contra el Covid para entrar al recinto fue una decisión que se tomó en consenso con todos los bloques, en la reunión de Labor Parlamentaria previa a la sesión.
Y contó que en la semana previa, desde la Secretaría Parlamentaria de la Cámara, por mensaje de texto al chat que tiene con los 50 diputados, se les preguntó a todos si tenían las dos dosis, de acuerdo a lo que se había acordado. Y reveló que ahí el legislador Argañaraz contestó que no las tenía. “Es mentira que no se lo consultó”, dijo Farías.
Sobre el fondo de la cuestión, el presidente de la Cámara fue contundente: “No podemos menos que cumplir con las exigencias que se le hacen al resto de la población. Hay un montón de actividades en las que se exige el ciclo de vacunación completa”.
También recordó que desde la propia Cámara de Diputados “hemos sancionado iniciativas pidiendo un plan de vacunación, que lleguen cuanto antes las vacunas, que se sancione a quienes no cumplen las normativas. ¿Cómo ahora nosotros mismos no vamos a hacer esto?”, se preguntó sorprendido.
“Si el legislador tiene una posición personal sobre esta vacuna, debiera respetar al resto que no quiere exponerse. Y no es verdad lo que dice que da lo mismo estar o no estar vacunados para el contagio”, contestó el presidente de la Cámara.
