En Rosario se sentó un precedente único e histórico en la Justicia: por primera vez una familia, que padeció el fallecimiento de uno de sus integrantes por Covid-19, logró una conciliación por 14 millones de pesos ante la ART de la empresa para la cual trabajaba. Se trata de un hecho “excepcional” que marca un antes y un después en litigios laborales pero, aclaran, es un hecho que no se podrá reproducir de manera sistemática dado que este caso en particular se originó en un contexto muy concreto.
Tenía 30 años, estaba casado y tenía una hija de dos (hoy tiene tres). Ejercía el cargo de jefe de posventa y stock en una compañía de venta de electrodomésticos. Su función era controlar stock, carga y descarga de camiones, entrega de mercadería tanto a clientes que compraban en el local como entregársela a cadetes que despachaban paquetes por ventas online. Era un trabajo arduo, que le demandaba ocho horas diarias de lunes a sábados con un medio franco rotativo semanal.
Ni él ni su esposa tenían patologías pero igualmente se cuidaban mucho cuando estalló la pandemia en marzo del 2020. Sin embargo, en diciembre de ese año, comenzó a sentirse mal sin saber muy bien por qué. Entonces tomó la decisión de acercarse al hospital Británico para que lo atendieran. Allí le realizaron el test por Covid-19, que arrojó resultado positivo. Frente a la noticia, le indicaron que volviera a su casa para cumplir con el aislamiento. Pero a los pocos días el malestar se acentuó y le comenzó a faltar el aire. Por eso decidieron internarlo, intubarlo y a los 30 días, el 12 de enero del 2021, finalmente falleció.
Ante esta situación, la abogada Florencia Gaglio, patrocinando a la familia, pudo ingresar una demanda en abril del 2021. En ese momento todavía no regía la obligatoriedad de asistir a comisiones médicas, que entró en vigencia recién el 3 de mayo. Se trata de una etapa decisiva en la determinación de la causal del problema.
Posteriormente la ART de la compañía en la que trabajaba realiza una contestación en la que “no niega que se haya contagiado en el ámbito laboral”, pero sí hace hincapié “en que se habían cumplido con todos los cuidados y protocolos sanitarios impuestos en aquel momento”, contó Gaglio a Suma Política.
Finalmente se decide ir a comisiones médicas para cumplir con esta instancia y obtener una respuesta definitiva sobre dónde se pudo haber producido el contagio de coronavirus. “El dictamen que se brindó fue que el trabajador se había contagiado en su puesto de empleo; prácticamente no hubo discusión por ninguna de las partes involucradas”, indicó la letrada.
En este escenario, se avanzó en un diálogo con la empresa de ART, que realizó un ofrecimiento económico de 14 millones de pesos, según lo que establece una tabla que considera años de antigüedad y edad del empleado. Se presentó lo convenido en el Juzgado de Primera Instancia Laboral N° 3 de la ciudad de Rosario donde se logró homologar este acuerdo.
“La suma de dinero se dividió en dos: la mitad lo cobra la esposa, por tratarse de una heredera forzosa y ser asociada conyugal y, el otro 50 por ciento se deposita en una cuenta para que su hija, que hoy tiene tres años, pueda utilizarlos al cumplir sus 18”, detalló Gaglio.
Si bien se trata de un primer caso en Rosario que marca un precedente histórico, hay que tomar en consideración varios factores excepcionales que se dieron en simultáneo para que esta conciliación pudiera avanzar de este modo por contagio de Covid-19.
“Es un caso muy puntual. Estoy muy segura de que no va a haber un boom de demandas y que no todas las empresas de ART van a salir a conciliar. Esta situación fue única porque la niña no estaba escolarizada, la esposa estaba desempleada, porque se contagia siendo un personal esencial y exceptuado que tenía que salir a trabajar, en un contexto donde los protocolos eran mucho más duros y exigentes, a diferencia de lo que sucede ahora. Sí es cierto que marca un precedente, pero es necesario dejar en claro que no todas las muertes por covid se van a dar de este modo”, aseveró la abogada.
Según pudo saber Suma Política, la noticia movió un poco el avispero y ya hay varios interesados en asesorarse al respecto por situaciones similares que deberán ser evaluadas una por una. El tiempo determinará si se trató finalmente de un caso inédito y único o si el derrotero de conciliaciones comenzó a rodar sin frenos.
