El diputado radical Maximiliano Pullaro tiene un objetivo político excluyente: que la oposición gane la provincia en 2023. Está convencido de que para lograrlo es necesario armar un gran frente que incluya a todos los partidos y darle todas las batallas que sean necesarias al PJ. “No le vamos a dar ninguna ventaja al peronismo, no lo hicimos ni lo vamos a hacer por más que entremos en alguna contradicción”, advierte, y transmite la sensación de que cuando lo dice, se está colgando una medalla.
Ex ministro de Seguridad de Miguel Lifschitz, defiende su candidatura por Juntos por el Cambio y elogia con entusiasmo a Carolina Losada, quien lo venció en la interna. “Fue una gran candidata, no tiene techo”, dice.
Pullaro admite que quiere ser candidato a gobernador, aunque no se pone plazos ni parece tener urgencias. “Voy a estar en el lugar que sirva para ganar. Mi objetivo es ganar”. En todo caso, sabe que con 47 años le queda tiempo para cumplir ese anhelo. “Puedo ser candidato en 2027, en 2031”, explica para poner en stand by sus aspiraciones.
Este es el diálogo que mantuvo con Suma Política:
—Usted fue cuatro años ministro de Miguel Lifschitz y reivindica la gestión de gobierno del Frente Progresista, sin embargo en las elecciones fue candidato de Juntos por el Cambio. ¿Cuál fue la razón para esa estrategia electoral?
—A fines de 2020, sacamos un video con el senador Felipe Michlig donde planteábamos que el adversario a vencer era el kirchnerismo. Y que lo que se discutía en la Argentina era tan importante que las contradicciones secundarias no nos podían mover del objetivo principal. Planteamos que teníamos que hacer los esfuerzos para construir un frente político común para quitarle a Cristina la mayoría en el Senado, y que el PJ sólo lograse dos o tres diputados nacionales. Soñamos con un frente santafesino con 1.100.000 votos y lo dijimos públicamente. Pero Carlos Fascendini lo dijo en diciembre de 2019, cuando asume la presidencia del partido.
—Pero no estuvieron todos juntos, porque precisamente el socialismo, el socio principal del Frente Progresista, no se sumó.
—Bueno, no coincidió con nuestra posición política. Nosotros entendíamos que no había otro camino para ganarle al PJ que no fuese un frente en el que estuviese Juntos por el Cambio. La decisión no fue equivocada porque terminamos ganando la elección. Logramos dos senadores de la UCR, algo que no había sucedido nunca, y dos diputados de la UCR.
—¿No le hace ruido que habiendo dirigentes radicales militantes, con trayectoria, uno de los lugares del Senado sea para alguien que llegó a la política hace pocos meses y no vive en la provincia?
—La sociedad elige y entiende por qué lo hace, no voy a cuestionar nunca eso. Pero cuando hice campaña con Carolina Losada, vi a una persona con muchísima empatía, con muchísima sensibilidad, con el coraje para llevar adelante los debates en el Congreso de la Nación. Tal vez algo que yo no comprendía en la primaria lo comprendí cuando hice campaña al lado de ella. Creo que fue la mejor candidata que podríamos haber tenido en esta coyuntura. No me hizo en ningún momento ruido. Si vienen personas de afuera a enriquecer la política, y lo hacen a la UCR, mejor. Pasó con Carolina pero también con Martín Lousteau, Facundo Manes, Martín Tetaz.
—Creo que son casos distintos. Lousteau llegó con otro recorrido y Manes siempre reivindicó su pertenencia a la UCR y sus ganas de participar en política.
—Cada uno tiene su perfil, y Carolina Losada fue una gran candidata. Nos dio un triunfo que hace años no teníamos, creo que no tiene techo.
—¿No tiene techo? Entonces es probable que sea candidata a la gobernación en 2023.
—No tengo idea que será lo que entiende ella o su grupo político, pero creo que es una candidata que hacía años que el radicalismo no tenía en Santa Fe. Le ganó al gobernador. Es muy fuerte ver que el gobernador, que puso la cara, que se involucró a fondo en la campaña, haya perdido como perdió. Nunca el PJ en el poder hizo una elección tan mala. Yo no la pongo en ningún lado a Losada, es un dato de la realidad.

—En 2023 se puede dar un escenario que reedite la interna de este año.
—Los objetivos de nuestro grupo y entiendo que también del partido son unificar a la oposición a través de un programa de gobierno; entendemos que tiene que estar JxC, el intendente Pablo Javkin, el PS, el PDP, y tenemos que hacer un esfuerzo para que ingresen otros actores de la política santafesina. Después los candidatos se definirán; va a ser un escenario nuevo y diferente. Y te diría más, debería haber sectores del peronismo también.
—¿En qué sectores del PJ está pensando?
—En actores de segunda línea de las ciudades o departamentos, con estructura territorial. No creo que pueda darse una confluencia con dirigentes de peso.
—Antes de las Paso, Felipe Michlig dijo en una entrevista con Suma Politica que el objetivo del radicalismo era liderar un gran frente opositor. Los resultados mostraron a la UCR como gran ganador. ¿Puede el PRO aceptar un cambio de liderazgo en la coalición?
—El radicalismo puede ser individualmente el partido con más volumen político de la provincia, superando incluso al PJ. Tenemos más presidentes comunales, más intendentes y más legisladores que el PJ. Ahora, a nadie le escapa que la unidad del radicalismo es muy difícil y los liderazgos van cruzados con otros partidos. En las Paso encabezaron tres candidatos radicales y uno del PRO, pero todos fuimos con sectores del PRO, de la Coalición Cívica, no fueron liderazgos unilaterales de la UCR. Lo que suceda tiene que ver con la articulación y el armado de un frente político y electoral. Pueden surgir actores emergentes, aparecer los intendentes, en las cuatro ciudades más importantes de la provincia tenés intendentes radicales y socialistas muy fuertes, está Javkin en Rosario y (Emilio) Jatón en Santa Fe. Lo importante es entender que el desafío es ganar la provincia y para eso tenemos que estar todos juntos. No hay ningún partido que tenga la capacidad política de liderar al resto, hay que ponerse de acuerdo en reglas de juego. Y después habrá una gran Paso.
—Usted deslizó en varias ocasiones que aspira a ser candidato a gobernador.
—Si, pero puedo ser candidato en 2027, en 2031. Voy a estar en el lugar que sirva para ganar en 2023. Mi objetivo es ganar.
—¿Hay conversaciones con otros partidos para armar el frente?
—El tema siempre estuvo sobre la mesa, en todo momento se siguió hablando.
—¿Con el Partido Socialista también?
—Con todos los partidos políticos. Algunos creen que no era el momento, otros no han estado de acuerdo. Pero nunca se cortó el diálogo político de la oposición.
—Se habló de que Evolución, el sector que usted lidera, quiere la presidencia de la Cámara de Diputados. ¿Es así?
—En principio no. Estamos bien con el presidente de la Cámara y con el socialismo. No es un objetivo que tengamos a la vista porque hay acuerdos estables que hacen que la Cámara funcione bien como está y que no haya niveles de tensión. Nada indicaría que eso pueda suceder.

—Hasta ahora pareciera que lo que une a la oposición es el rechazo al kirchnerismo, no se escucharon propuestas en la campaña.
—A nosotros nos movió el rechazo al kirchnerismo, porque era una elección nacional, y también darle un golpe muy fuerte al gobierno provincial porque entendemos que es el peor de la provincia desde 1983. En una elección nacional se discuten cuestiones nacionales, por eso el foco estuvo en el kirchnerismo. Pero también expusimos políticas para Santa Fe. Apostamos a un frente político desde la construcción de programas de gobierno y como partido vamos a trabajar en eso desde el año que viene. En políticas de seguridad pública, de educación, salud pública, de infraestructura, de medio ambiente, todos temas fundamentales para la provincia.
—En esta búsqueda de construcción de un gran frente opositor, ¿cómo se explica que su sector haya abandonado el bloque del Frente Progresista en Diputados?
—Para dar un mensaje muy claro. En la elección nacional íbamos a jugar en JxC y había mucho ruido de que podíamos no hacerlo después de haber perdido las primarias. Fuimos claros: jugamos acá y trabajamos para el triunfo de JxC, y así lo hicimos. Los mensajes tienen que ser claros y contundentes, más en un proceso electoral. No podíamos pertenecer a dos espacios.
-Pero de hecho Evolución estuvo en dos espacios políticos diferentes…
—¿En cuáles?
—En Juntos por el Cambio en Rosario y en el Frente Progresista en la ciudad de Santa Fe.
—Porque fue todo un proceso político. No nos olvidemos que la convención radical se da 15 días después de la muerte de Miguel. Es un proceso que se dio dentro del radicalismo. En las elecciones nacionales nosotros jugábamos dentro de JxC y en muchos gobiernos locales veníamos de años de alianza con el PS. Y romper esas alianzas significaba perder comunas y municipios. Y no le íbamos a dar ventajas al peronismo. No le vamos a dar ventaja en ningún lugar al peronismo, no lo hicimos ni lo vamos a hacer. ¿Qué íbamos a hacer? ¿Le entregamos las comunas al peronismo? Ni loco. No vamos a darle ventajas al peronismo por más que entremos en alguna contradicción.
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Periodista. Cofundador y editor de Suma Política. Ex secretario de Redacción del diario La Capital. En Twitter: @rpetunchi
